México avanza en una fase decisiva rumbo a la Copa Mundial de la FIFA 2026, un torneo que marcará un antes y un después en la organización de eventos deportivos globales en Norteamérica.
Este jueves 27 de noviembre, durante la ‘Mañanera del Pueblo’ encabezada por la presidenta Claudia Sheinbaum, la representante de México ante la FIFA, Gabriela Cuevas, presentó un balance detallado sobre los trabajos técnicos, logísticos y de infraestructura que permitirán recibir el torneo más grande en la historia del fútbol.
Cuevas subrayó que la edición 2026 es innovadora desde su diseño. Por primera vez, la FIFA y las ciudades sede integraron comités de organización locales para coordinar directamente temas operativos, de seguridad, logística y movilidad. En el caso de México, serán trece partidos distribuidos entre Ciudad de México, Guadalajara y Monterrey, además de cuatro juegos de repechaje que se disputarán en territorio nacional.
La representante agradeció el respaldo de la Secretaría de Gobernación, así como el trabajo de la jefa de Gobierno capitalina y los gobernadores de Jalisco y Nuevo León, destacando la “disposición al diálogo y al trabajo coordinado” que ha permitido consolidar avances en múltiples frentes. De acuerdo con Cuevas, el mensaje es claro: “jugando en equipo se obtienen grandes resultados”.
Uno de los ejes principales es la descentralización de las actividades del torneo, particularmente en la Ciudad de México. Se han planificado festivales futboleros, espacios culturales, actividades deportivas y transmisiones gratuitas en distintos puntos de la capital, con el fin de extender el impacto social y garantizar la inclusión de las comunidades.
En Nuevo León, el Parque Fundidora destaca como ejemplo de reconversión urbana, con la recuperación de más de 100 hectáreas que ahora funcionan como áreas verdes y espacios públicos. Mientras tanto, en Jalisco se avanza en la línea cinco del transporte público y en un proyecto de regeneración urbana que conectará el aeropuerto con la zona metropolitana de Guadalajara, optimizando la movilidad durante el Mundial.
Cuevas también enfatizó el papel de los estadios sede, que han invertido para cumplir con los más altos estándares de conectividad, sustentabilidad y accesibilidad exigidos por FIFA. Estas mejoras serán parte del legado que permanecerá para eventos futuros y para la vida cotidiana de las aficiones locales.
En materia de seguridad y protección civil, los trabajos comenzaron hace tres años. Las dependencias federales se coordinan con gobiernos estatales y municipales, así como con FIFA, para homologar protocolos aplicables en estadios, espacios públicos y zonas de celebración. Las acciones incluyen enfoque de género, protección integral para niñas, niños y adolescentes y planes unificados para emergencias.
La infraestructura es otra prioridad central. Cuevas anunció avances significativos en movilidad y accesos: el tren de Buena Vista al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles en la Ciudad de México está próximo a ponerse en marcha, mientras que la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes revisa con detalle las obras necesarias en cada ciudad sede. Paralelamente, ya opera una mesa de coordinación con los grupos aeroportuarios del país y otra enfocada en las carreteras que conectan a las tres metrópolis involucradas.
